Birr a menudo se describe como el centro de Irlanda, pero en un momento también fue el centro del universo. Efectivamente, los que venimos del pueblo creemos que aún lo es!

Ha habido un castillo en Birr desde 1170, cambiando de manos con frecuencia durante los primeros cuatrocientos años antes de convertirse en la sede familiar de la familia Parsons, ahora los Condes de Rosse. De hecho, desde 1620 hasta 1899 el pueblo se llamó oficialmente Parsonstown.

El tercer conde de Rosse era un científico entusiasta con un interés particular en la astronomía. Encargó la construcción de un telescopio en los terrenos del castillo. Entró en uso en 1845 y seguiría siendo el telescopio más grande del mundo, hasta la finalización del telescopio Hooker en 1917. Conocido como el 'Leviatán de Parsonstown', el reflector medía 183 cm (72 pulgadas). El telescopio fue restaurado en la década de 1990 y forma el corazón del 'Centro Histórico de Ciencias de Irlanda', un museo de botánicos y astrónomos históricos.

En el recinto se encuentra un radiotelescopio de última generación que contribuye con sus hallazgos a la red LOFAR. Los terrenos del castillo también albergan el puente de hierro forjado más antiguo de Irlanda y el seto de boj más alto del mundo.